Uno debería ser siempre un poco improbable. Oscar Wilde
viernes, 15 de julio de 2011
Herida pequeña es el adiós
El adiós es una herida pequeña,
más leve que el aguijón de la avispa
que marea, enferma,
y es una delicia envenenarse así,
por tan simple contacto.
Herida pequeña es el adiós,
no mata.
Es también el adiós de la avispa, así como el de la abeja, que al insertar el aguijón y luego disponerse a la huida, huye mucho más lejos: ya sin la mitad del vientre huye del lugar y del mundo entero. Algo así como la ley del Talión en el pequeño mundo animal. Otro hermoso poema
El adiós es una cortada de papel. Lo que escribes, a veces, me perfora.
ResponderEliminarGracias, Susan, de verdad; Irene
ResponderEliminarDe verdad que perfora, como dice Susan.
ResponderEliminarGracias, Irene. Siempre es un placer
Bibiana, compraré una perforadora, a ver si me doy cuenta. Gracias, Irene
ResponderEliminarEs también el adiós de la avispa, así como el de la abeja, que al insertar el aguijón y luego disponerse a la huida, huye mucho más lejos: ya sin la mitad del vientre huye del lugar y del mundo entero. Algo así como la ley del Talión en el pequeño mundo animal.
ResponderEliminarOtro hermoso poema