jueves, 23 de febrero de 2012

Objetivismo

Se secó el patio. Antes, las baldosas
brillaban rojas y había un charco en el centro,
señal de que el patio es viejo, el piso se hunde.
Nadie entró el triciclo; quedó ahí afuera
goteando.
El cielo sigue seco como el patio.




Inédito

martes, 21 de febrero de 2012

Pesca en el lago

Al lado de los patos
(una familia de pequeños patos salvajes)
navega una botella de lavandina,
de plástico, amarilla.
Para algunos filósofos y poetas / esto fue
una imagen de lo real miserable.
Creían que
había sido puesta
precisamente ahí, junto
a patos salvajes, en el lago,
para regocijo y reflejo causal
del desencanto.
El plástico amarillo navegó
hasta detenerse en una isla artificial.
Los patos dieron la vuelta y
siguieron su camino.
Patos hambrientos, pensé, van a comer
la carnada perdida
por esas cosas de la corriente.
Los chicos veían cómo se alejaba su botella
hacia el centro del lago,
maldijeron al viento
y sólo atinaron a sufrir
y a sonreír.

De La calma, recopilado en La mitad de la verdad, 2008

sábado, 18 de febrero de 2012

Plegarias atendidas

Plegarias atendidas, como se barre
la herida, lo que había que sufrir,
la lástima, la mía.

Plegarias atendidas:
he dejado de rezar,
las rodillas se arrastraban
porque dolían.

Lo dejado a perder, valentía o
plegarias atendidas.

Hora que no viví, hora que no vivía
llegaron por plegarias atendidas.

He decidido llorar tanto
más
el dividendo o la nada
por plegarias atendidas.
**
Obviamente se parafrasea lo escrito por santa Teresa: "Se derraman más lágrimas por plegarias atendidas que por las no atendidas".

viernes, 17 de febrero de 2012

Admirable me tendía



Me di sin decir esta boca
 es mía, como una medusa,
 violeta me abrí, me contraje,
 transparente y
 gelatinosa, admirable me tendía,
 y el mar me dejó como a un desperdicio de
 la orilla, y
 yo no contuve mi forma.


 De Solo de contralto, recopilado en La mitad de la verdad, 2008.

sábado, 11 de febrero de 2012

Al final del día


Y ahora bailás,
das la vuelta y flotás en el aire,
no sé qué se festeja
pero bailás la salsa que suena en el parlante,
casi flotás como quien llega a Dios,
satisfecho pero no, no es eso, hay algo falso, tampoco
es alegría lo que suena,
fueron bombos.

Al volver a casa, ya descalzo
hartos de zarandear los pies
dicen algo, no sé bien qué,
quizás es la madera que cruje debajo de vos,
algo te hace tambalear
al final del día, 
cuando suena la sirena; la de los barcos, la de la fábrica.

Inédito

domingo, 5 de febrero de 2012

Tibia e impura

LUCINA

                   a mi hija

Va a llamarse Lucina.
Va a tener esa luz
en el nombre y
cuando aspire el aire
(tibia e impura)
gozosamente, el aire.