Ahora dice que tiene fríos los pies,
camina despacio.
Antes, cuando manejaba,
cuidaba detenerse a cada cambio de luz,
vigilaba el trayecto.
Vendió el auto como quien se inclina
y se persigna, rendido, suplicante.
Pide a Dios por una vez que lo contemple,
y que él deje de mirar
como si fuese Dios. Por una vez,
dice cuando camina, temer,
decir que teme.
Inédito